El truco de la esponja para plantas hermosas y exuberantes

¿Has notado que tus plantas se están quedando mustias y agotadas ? Si quieres que se vuelvan hermosas y exuberantes, aquí tienes el truco que necesitas para solucionar el problema.

Ha intentado recuperar su planta enferma y devolverla a la vida, pero nada parece haber funcionado… A pesar de todos tus esfuerzos, tu planta ya no tiene vigor ni energía para renacer.

¿Qué debe hacer en este caso? Acostumbrarse al hecho de que está completamente muerto o buscar otra solución? ¿Por qué no elegir la segunda opción? Y si tu planta a salvar es una orquídea, verás que puedes devolverle la fuerza gracias a este increíble truco..

El truco de la esponja para salvar tus plantas ¡sin energía!

La orquídea es una magnífica planta que se distingue por sus coloridas flores. Por eso se considera una de las plantas más buscadas para adornar el hogar y el jardín.

Esta planta no es difícil de cultivar, incluso en casa. Sin embargo, hay algunas condiciones que debes tener en cuenta. Riégala con moderación y dale mucha luz solar.

Si crees que te has equivocado porque tu planta se está muriendo, ¡no la tires! Este consejo podría ser la solución definitiva para devolverla a la vida en poco tiempo.

Empieza por equiparte con las siguientes herramientas:

  • Canela en polvo
  • Una botella de plástico
  • Unas tijeras
  • Una maceta con plantas
  • Un pulverizador
  • Una bolsa de plástico
  • Una esponja lavavajillas

¿Cómo se hace?

En primer lugar, saque su orquídea de la maceta y límpiela con cuidado para eliminar las partes podridas y secas. Utilice tijeras si es necesario. A continuación, espolvoree el corazón de la orquídea con canela molida. Este ingrediente tiene una función curativa, secando todos los cortes de la planta. Así se evita que microorganismos como mohos y hongos infesten la planta.

Después de estas dos operaciones, deje reposar la orquídea en un lugar seco durante unas 48 horas. A continuación, trasplante la planta con la botella de plástico. Córtela horizontalmente, asegurándose de que en la botella quepa toda la planta. Haz algunos agujeros en la botella para que el agua pueda salir.

Para crear la base de la botella en la que crecerá la planta, utiliza la esponja lavavajillas. Pero antes de introducirla en la botella, rocíala. Ahora ya puedes coger la botella de plástico y meter dentro la maceta con la planta. Ciérrala con un alambre metálico. Ya has creado un microclima dentro de la botella que permite que la planta se recupere. Sólo queda colocar la maceta cerrada con la botella y la bolsa en un lugar luminoso.

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